El Método SAVAM y el dolor

23.01.2021

En nuestro día a día nos relacionamos a menudo con el dolor físico, y aunque en ocasiones la causa es mecánica o física, en nuestra experiencia hemos observado que en muchas ocasiones está también asociada a una causa emocional. 

Cuando el dolor está ligado a un tema emocional la intervención única a nivel físico no acaba de ayudarnos a hacer desaparecer o mejorar este dolor. Cuando el traumatismo (golpe, herida, tirón,...) se produce en el mismo momento que algo nos impacta emocionalmente (ya sea para bien o para mal) ese dolor queda relacionado directamente a esa emoción/sensación y eso influye en la calidad del dolor, es decir, puede hacer que se intensifique, se prolongue o se agudice.  

A modo de ejemplo os podemos compartir un caso (para mantener la confidencialidad usaremos un pseudónimo): Mariola presenta una epicondilitis derecha ( dolor en el codo derecho) desde el día que se murió su mascota  y fue con sus hijas a enterrarla al campo. Recuerda perfectamente que el dolor se inició mientras cavaba el hoyo donde enterrar el animalito. Con algo de tratamiento antiinflamatorio y ayuda del fisioterapeuta consiguió que el dolor mejorara, aunque no desapareció por completo. Pasados 2 meses de eso, acude a la consulta y cuenta que últimamente  nota que el dolor ha empeorado sin causa física aparente (no lo ha forzado, no se ha dado un golpe,...) mientras trabajamos la actitud de culpa, Mariola toma conciencia de que la última semana murió una de sus pacientes, ella considera que podía haber hecho algo más, que el fallecimiento es culpa suya. Indagando un poco más, se da cuenta también de que se sintió igual cuando murió su mascota y puede identificar esta actitud en otras situaciones similares relacionadas con la pérdida. Tras liberar esa actitud de culpa (la idea recurrente y que marca como se relaciona con ella misma, con los demás y con su entorno de que todo lo que ocurre es de alguna manera culpa suya, especialmente cuando tiene que ver con la pérdida) el dolor desapareció y no se ha vuelto a repetir.

Con el Método SAVAM te ayudamos a detectar y liberar los patrones emocionales reprimidos que en muchas ocasiones están relacionados con el malestar físico, emocional o mental que puedas padecer.